Primero esperó unos minutos,
después revisó todos los ángulos que los relojes ofrecen,
luego dijo; quizás el lunes,
puede que en noviembre,
dentro de poco se derretirá la nieve,
caerán los primeros copos.
Se hizo tanto y plástico,
agotó sus ojos y su danza,
esperó y esperó hasta que.
Iván Onia Valero
... y esta tarde paramos en Cádiz!
No hay comentarios:
Publicar un comentario