Es una hermosa noche de verano.
Tienen las altas casas
abiertos los balcones
del viejo pueblo a la anchurosa plaza.
En el amplio rectángulo desierto,
bancos de piedra, evónimos y acacias
simétricos dibujan
sus negras sombras en la arena blanca.
En el cénit, la luna, y en la torre,
la esfera del reloj iluminada.
Yo en este viejo pueblo paseando
solo, como un fantasma.
Antonio Machado
Óleo: Midnight Walk, de Marta Boza
Hola Iván. No te preocupes por lo del permiso, para eso se pintan cuadros, para que los vea la gente. Veo que has puesto la autoría y me alegra que te haya gustado y que te sirva. Muy bonito el poema! Un saludico
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