Quién te va a salvar, Cierva.
De estos graves caimanes,
de estos señores lentos.
Días antes dijiste "sí";
al vestido, a la boina,
al tobillo desnudo.
La espalda hecha de espadas.
Sólo canta.
Sé simpática.
Ya/sabes.
No murmures.
Huele bien.
Ahora, Cierva.
De esta noche anfibia,
de este bostezo verde.
Quién te va a salvar.
Iván Onia Valero
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